
Dios sacará tu fortaleza mas grande

No nos gusta admitir nuestras debilidades. La expresión “juega con tus puntos fuertes” se trata de centrarse en lo que hacemos bien. Si la gente pudiera vernos por lo que realmente somos desde adentro, incluidas nuestras luchas, defectos e inseguridades, podría cambiar su percepción de nosotros. Nuestras debilidades pueden estar ocultas a la vista, pero Dios lo sabe. y Dios sacará tu fortaleza más grande de tu punto más débil.
No te fijes en su apariencia ni en su elevada estatura, pues yo lo he rechazado. No se trata de lo que el hombre ve; pues el hombre se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.
1 Samuel 16:7 DHH94PC
La debilidad es una oportunidad para que Dios trabaje poderosamente en nuestras vidas. Incluso cuando nuestra carne y nuestro corazón nos fallan, Él es la fuerza de nuestro corazón. A medida que reflexionamos sobre las áreas de nuestra vida en las que sabemos que somos débiles, sea cual sea la capacidad, miremos a Jesús y meditemos en cómo obra a través de nuestras debilidades para su gloria.

Dios sacará tu fortaleza más grande de tu punto más débil
La Biblia está llena de personas que en ocasiones fueron débiles, como nosotros. Ya sea la jactancia de José lo que llevó a su hermano a traicionarlo, el apóstol Pablo golpeado y encarcelado por predicar el evangelio, o Pedro negando a Jesús tres veces, hay personas falibles en las páginas de las Escrituras. Sin embargo, José se convirtió en el gobernador de Egipto, las cartas de Pablo forman una gran parte del Nuevo Testamento que leemos hoy, y Pedro fue reinstalado y comenzó la iglesia primitiva. Puede ser reconfortante saber que Dios sacará tu fortaleza más grande y saber que el Señor está obrando en nuestros momentos más débiles y que tiene un plan y un propósito.
El Señor le dijo a Pablo:
Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.
2 Corintios 12:9 RVR190
Cuando somos débiles, nos permitimos depender humildemente de un Dios que puede alinear nuestra voluntad con la Suya. Es una oportunidad para que participemos en los planes divinos que Dios tiene para el mundo. Y recuerda Dios sacará tu fortaleza más grande de tu punto más débil.