Amós 3:8 – Si el león ruge, ¿quién no temerá?
¡No tengas miedo! Suena tan fácil, tan atractivo. Muchos de nosotros daríamos casi cualquier cosa si pudiéramos deshacernos de nuestros miedos. Pero las palabras “No tengas miedo” simplemente no parecen encajar con la realidad de nuestra vida diaria. Hay tantas cosas a las que temer. Hay tantas tormentas inesperadas que pueden hacernos perder la cabeza. Hoy quiero recordarte que el León de Tribu de Juda está contigo y como dice Amós 3:8 si el León ruge quien no temerá.
Si el león ruge, ¿quién no temerá? Si habla Jehová el Señor, ¿quién no profetizará? — Amós 3:8 RVR1960
Muchas preguntas sin respuesta pueden confundirnos e incluso asustarnos. ¿Durará mi salud? ¿Sobrevivirá mi matrimonio? ¿Podré hacer los pagos de mi hipoteca? ¿Cómo puedo mantener a mi familia? ¿Conservaré mi trabajo? ¿Habrá suficiente comida para mi familia para pasar otra semana?
Para algunos de nosotros, el miedo es un compañero constante que nos roba la alegría. Jesús vino a calmar nuestras tormentas. En Amós 3:8, se muestra su poder sobre nuestros miedos y aflicciones. Ningún enemigo que se levante en tu contra puede enfrentar al poderoso León. ¡Él es verdaderamente Dios! y si el ruge todos temen a su majestad.
Jesús quiere estar junto a nosotros en nuestras tormentas para calmar nuestros miedos y recordarnos que su poder para traer paz es tan real hoy. Los discípulos en la barca también estaban aterrorizados. En el mar tempestuoso, su barco estaba a punto de hundirse. Y, sin embargo, Jesús preguntó: ¿Por qué tienes tanto miedo?
Ahora no es el momento de tener miedo o ceder al pánico. Recuerda el versículo Amós 3:8, recuerda que el Léon está contigo y cuando Él ruge tus enemigos, temores, y aflicciones huyen. Como hijos de Dios, nos debemos rehusar a ser gobernados por nuestros miedos. Solo confía en Dios.